SUTTON, Bárbara & VACAREZZA, Nayla Luz. (Editoras) (2021) Abortion and Democracy: Contentious Body Politics in Argentina, Chile, and Uruguay, London, Routledge, 276 pp.

Abortion and Democracy: Contentious Body Politics in Argentina, Chile, and Uruguay, de Bárbara Sutton y Nayla Vacarezza, reúne indagaciones de destacadxs intelectuales de distintas disciplinas que analizan las políticas de aborto en los países del Cono Sur de América: Chile, Uruguay y Argentina. Provenientes en gran parte de esta región y con una vasta producción en lengua castellana, han producido este libro en idioma inglés para compartir con otras culturas miradas propias sobre procesos históricos regionales.

Los países del Cono Sur comparten, más que cercanías geográficas, una historia política común caracterizada por un pasado reciente de dictaduras militares y posteriores procesos de democratización, cuyas posibilidades y limitaciones aún son foco de disputas. Este libro enseña cómo, con diferentes matices, estos procesos han marcado las luchas, reivindicaciones y aspiraciones de estos pueblos con memoria.

Tras el retorno democrático, y gracias a él, se fortalecieron los movimientos de derechos humanos, entre ellos los de mujeres, feministas y de la diversidad. Su extraordinaria participación en la región, con masivas movilizaciones callejeras y alianzas de amplia transversalidad, permitió alcanzar significativos logros. Así, respecto al aborto, en 2017 Chile pasó de una política de prohibición total de la práctica a una despenalización parcial, un avance que tiempo atrás resultaba poco probable. Argentina logró la legalización a finales del 2020, tras décadas de luchas e intentos fallidos. Y en Uruguay, primer país de la región en legalizar el aborto, los feminismos se organizan para defender su implementación. Sin embargo, a la par de dichos avances, las reacciones de grupos contrarios a las demandas de género vienen recrudeciendo viejas tensiones sociopolíticas, haciendo tambalear ciertos logros y obligando a su defensa.

Los recientes sucesos de impacto global tampoco pueden pasarse por alto. La pandemia de COVID-19 que afectó prácticamente a toda la población mundial, profundizó las condiciones de precariedad ya existentes en la región, imponiendo la incertidumbre como malestar cotidiano y haciendo tambalear las instituciones políticas democráticas, incapaces de dar respuesta a tal crisis.

En este escenario, vale preguntarse qué está en juego en las sociedades actuales, y Abortion and Democracy permite dimensionarlo. En un contexto de grandes cambios y desafíos, pone en valor los procesos de lucha locales por el aborto, destacando las posibilidades de los sistemas democráticos para albergar estas disputas, pero también señalando sus limitaciones. Como indican las autoras en su introducción, la promesa de la democracia no se agota en la paridad de representación política, sino que permite imaginar horizontes de soberanía política, autonomía corporal, justicia social y reproductiva, incluyendo el derecho al aborto (p. 8). Sin embargo, como se demuestra a lo largo de la obra, este resultado no está garantizado (p. 9).

En este sentido, el libro presenta los modos de la política feminista que constituyen un soporte para fortalecer y profundizar los sentidos de la democracia. Además, abordan las luchas por el derecho al aborto, mostrando cómo el “legado autoritario, y la oposición a él, ha dado forma a aspectos de la política del aborto en la democracia, incluidos los símbolos activistas, el discurso político y los afectos, la dinámica de los partidos y las alianzas de movimientos” (p. 3). Aquí, la política de aborto no se ciñe a aspectos formales de políticas públicas, legislaciones y normativas estatales. También incluye el proceso por el cual el aborto es puesto en agenda pública, y en el que diversos actores disputan el modo de definir dicha política, sus alcances y límites, condicionando/posibilitando determinadas prácticas sociales y simbólicas que afectan los cuerpos y vidas de integrantes de una comunidad en particular.

El libro se compone de cuatro partes que organizan once capítulos, cuenta con una introducción de las editoras y un epílogo de Sonia Álvarez, especialista en movimientos sociales y feministas. Mientras la primera parte ofrece una mirada comparativa y transnacional de la política de aborto en Argentina, Chile y Uruguay, los siguientes tres se enfocan en los procesos políticos en torno al aborto de cada país.

En el primer apartado, Cora Fernández Anderson escribe Abortion and Political Parties in the Southern Cone: Electoral Costs, Platforms, and Feminist Activists. Allí analiza cómo los principales partidos políticos de la región llegaron a posicionarse sobre el aborto. Distinguiendo el nivel de institucionalización de los partidos, explica cómo la orientación política, de derecha, centro o izquierda, influye en el rechazo o inclusión de ciertas demandas en las plataformas partidarias. Pero también influyen las singularidades de cada transición democrática, las movilizaciones y luchas feministas y, especialmente, las estrategias de aquellas militantes de doble pertenencia, al movimiento feminista y a los partidos, cuyo trabajo fue clave para sostener el reclamo tras cada rechazo y postergación de estas instituciones para promover sus reivindicaciones.

Otro frente de lucha por la liberalización del aborto es el activismo judicial. En Feminist Lawyers, Litigation, and the Fight for Abortion Rights in the Southern Cone, Elizabeth Borland analiza el modo en que abogadas feministas se organizan para desarrollar estrategias situadas y según la “estructura de oportunidades legales” de cada país, valiéndose de las experiencias y el apoyo de redes legales feministas trasnacionales. Además de la promoción de nuevas leyes, estas estrategias incluyen litigios estratégicos en casos que consigan desafiar interpretaciones restrictivas de las leyes existentes, estableciendo otras que permitan ampliar el acceso al aborto. También abarcan movilizaciones públicas tendientes a politizar, sensibilizar y sumar apoyo a las disputas judiciales. Si bien suelen ser vistas con escepticismo, las estrategias judiciales demuestran ser necesarias, incluso para sostener los avances legales de la región ante eventuales reacciones que pretendan un retroceso.

En Orange Hands and Green Kerchiefs: Affect and Democratic Politics in Two Transnational Symbols for Abortion Rights, Nayla Luz Vacarezza analiza cómo a través de símbolos visuales, los feminismos comunican sentidos y provocan fuerzas afectivas capaces de tender puentes entre las historias colectivas de lucha de la región. La mano alzada que vota, de color naranja, es un símbolo que surge en los 2000 en Uruguay. Según Vacarezza, condensa aspiraciones a una democracia pluralista, a la vez que permite figurar el voto como un modo de participación política que potencialmente puede ampliar los valores democráticos incluyendo derechos sexuales y reproductivos.

El pañuelo verde comenzó a ser visible en Argentina, en el Encuentro Nacional de Mujeres de 2003. Reivindica la lucha de las Madres de Plaza de Mayo quienes, desde finales de los 70, comenzaron la larga marcha, aún vigente, por memoria, verdad y justicia, identificándose con un pañal blanco sobre la cabeza, símbolo del vínculo afectivo con sus hijxs y del que tomaron fuerza para exigir su aparición con vida al Estado. El pañuelo verde señala una vez más las conexiones entre lo íntimo y lo político, al reclamar el aborto como una de las tantas deudas de la democracia. Vacarezza muestra cómo estos símbolos configuran identidades colectivas, acompañan modos creativos de protesta, despiertan interés de amplios sectores y trascienden las fronteras para ser reapropiados y resignificados en distintos países e incluso continentes.

Este apartado concluye con Neoconservative Incursions into Party Politics: The Cases of Argentina and Chile, de Juan Marco Vaggione y José Manuel Morán Faúndes. Aquí los autores analizan el proceso de partidización de las agendas neoconservadoras, para comprender cómo utilizan los canales democráticos para promover sus agendas conservadoras y autoritarias. Una de estas estrategias se basa en la construcción discursiva de un “otro” peligroso englobado bajo el significante “ideología de género”. Éste se impondría a través de políticas de Estado sobre género, sexualidades y reproducción que, aparentando ser de derechos, amenazarían el orden moral natural. Como contraparte, consolidan un “nosotros” que reúne un amplio espectro de sectores contra la ideología de género y se erigen en defensores del orden amenazado. Al inscribir su lucha en la defensa de la vida, la familia y la libertad -de adscribir a ideas que repudian y “patologizan las expresiones de género y sexualidad que se alejan de la norma cis-heterosexual” (p. 100)-, neoconservadores y neoliberales hacen frente común a lo que advierten como una intromisión del Estado.

El segundo apartado es sobre Uruguay. Inicia con Push and Pull”: The Rocky Road to the Legalization of Abortion in Uruguay, donde Alejandra López-Gómez, Martín Couto, y Lucía Berro Pizzarossa analizan el proceso de discusión social y política en torno al aborto. Enfatizan los términos y modalidades de esta discusión, que delimitan los alcances y la efectividad de la política resultante. Ciertamente, la ley aprobada y vigente se distingue por su moderación, propia de la cultura política y del sistema de partidos del país, y es resultado del “tira y afloje” entre posiciones radicales y conservadoras. Por consiguiente, establece menos garantías y una mayor tutela estatal sobre quienes deciden abortar (p. 123), generando dificultades en su acceso a la práctica y la continuidad de formas de violencia sobre sus cuerpos.

Las vulneraciones asociadas con el aborto legal, ya no clandestino, son analizadas por Susana Rostagnol y Magdalena Caccia en Women’s Bodies, and Eternal Battlefield. Dado que los sectores conservadores consiguieron imponerse de forma secularizada a través del sistema político, lograron inscribir el derecho al aborto como un asunto primordialmente de salud, sin una perspectiva feminista. Así, el sistema médico obtuvo facultades para tutelar los cuerpos de mujeres y personas gestantes, monopolizando los servicios de aborto e imponiendo requerimientos, tiempos, métodos y circunstancias para abortar. Tales mecanismos de control expresan una continuidad con los periodos dictatoriales, afectando la calidad democrática y el derecho a la ciudadanía de mujeres y personas gestantes, en la medida que se deslegitiman sus decisiones sobre sus cuerpos y vidas.

La tercera parte explora la política de aborto en Argentina, con énfasis en las dinámicas e inventivas de los feminismos. María Alicia Gutiérrez comparte la larga trayectoria de lucha, aún vigente, de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito. Surgida en 2005, la Campaña debió presentar hasta siete veces el proyecto de ley para recién ser tratado en las cámaras legislativas. Su carácter amplio, federal y horizontal le permitió ocupar el tiempo de dilaciones de la política argentina, para desarrollar estrategias que, aprovechando los intersticios legales, permitieron ampliar el acceso al aborto a quienes lo necesitaron, difundieron los fundamentos del reclamo de aborto, y contribuyeron a la “despenalización social” del aborto, incluso antes que la clase política argentina se animase a atender su justo reclamo.

Una vez que se abrió el debate legislativo, una de las tantas iniciativas feministas fue dar batalla en las redes sociales. En Social Media Debate on #AbortoLegal in Argentina, Claudia Laudano analiza cómo el uso de redes sociales, específicamente Twitter, no solo amplió la esfera pública sino que las interacciones que allí sucedieron durante el debate por la legalización del aborto en 2018, lograron repercusiones mediáticas y políticas. También fueron de gran apoyo en la votación legislativa de 2020, en el marco de la pandemia, cuando los encuentros cuerpo a cuerpo en espacios públicos se vieron impedidos y había que exigir la legalización del aborto por otros medios. Lejos de tratarse de eventos totalmente espontáneos, el ciberactivismo configura una de las estrategias más relevantes desplegadas por los feminismos en los últimos años.

Otra experiencia novedosa e incidente en Argentina es la de Socorristas en Red. Esta organización surge en 2012, integra la Campaña y reúne más de 50 colectivas que comparten información sobre aborto, ofrecen cuidados y acompañamiento a quienes deciden abortar, y desarrollan estrategias para ampliar y mejorar los servicios de aborto. En Transforming Abortion Access through Feminist Community-Based Healthcare and Activism: A Case Study of Socorristas en Red in Argentina, Brianna Keefe-Oates indaga cómo los sentidos y modalidades de acción del activismo socorrista, sus formas creativas de reclamar y ejercer derechos, desbordan los límites de la democracia. Con persistencia, han sabido establecer vínculos de colaboración, pero también de presión, con sectores estatales, investigadorxs y trabajadorxs de salud, contribuyendo a mejorar la salud pública. Aún en las regiones del país en que ciertos avances normativos fueron ignorados por los gobiernos provinciales, este activismo permitió federalizar los derechos vigentes.

La cuarta parte está dedicada a Chile, último país del Cono Sur en recuperar la democracia, y donde recién en 2017 lograron la despenalización parcial del aborto modificando el decreto dictatorial de prohibición total. En Between the Secular and the Religious: The Role of Academia in the Abortion Debate in Chile, Lidia Casas Becerra analiza cómo las academias laicas y confesionales, con enfoques e intereses divergentes, pasaron del silencio e indiferencia a la participación con potencial incidencia en las discusiones. El texto se trama con la experiencia personal de la autora, como abogada académica y feminista con una actuación relevante durante el proceso que llevó a la reforma. Y muestra cómo lxs académicxs aportaron opiniones teóricas al debate, participaron en la redacción de propuestas de reforma penal y legal, realizaron asesoramientos a instituciones gubernamentales y también desarrollaron análisis críticos y reflexivos a partir de investigaciones empíricas ancladas en la vida cotidiana de las personas.

El camino hacia la reforma no fue sencillo: requirió trabajo sostener la movilización y el apoyo a este proyecto, y así conmover el pacto de no avanzar para no retroceder, en una democracia que nunca dejó de percibirse vidriosa a sí misma. En este contexto, la reforma significó un avance cultural, simbólico y jurídico, pero no un techo para los reclamos feministas.

En Exploring Alternative Meanings of a Feminist and Safe Abortion in Chile, Lieta Vivaldi y Valentina Stutzin analizan los discursos y prácticas de acción directa del Colectivo Universitario de Disidencia Sexual y la red Lesbofeminista, integrada por la Línea Aborto Libre y Con las Amigas y en la Casa. Frente a leyes que prohíben o garantizan mínimamente el aborto, estos grupos feministas operan en los márgenes del Estado. Difunden información sobre aborto, brindan acompañamiento, arman redes de solidaridad y participan públicamente en manifestaciones y performances artísticas. Desde una perspectiva de la disidencia sexual e influenciados por los feminismos decoloniales, indígenas y comunitarios, disputan el lenguaje liberal de los derechos individuales que supone un sujeto sexual racional, dueño de sí, y por lo tanto responsable individualmente de sus acciones. Su política es de supervivencia y prefigurativa, ya que procuran resolver necesidades agravadas por la desidia estatal, y a la vez involucran acciones de cuidado colectivo, autonomía y agencia relacional, reciprocidad y amistad.

En conjunto, este libro enseña cómo los feminismos han logrado andar ese sinuoso camino fronterizo, en y más allá del estado de lo establecido, para construir desde ya el hogar deseado. Y es que, si la democracia está ceñida, si aún subsisten en ella violencias y marcas de la dictadura, si aún no puede alojar la multiplicidad de modos de vida y pensamientos que conforman nuestra sociedad, será ineludiblemente desde su adentro, pero yendo más allá de sus márgenes, que podremos alcanzar las justicias que queden por conquistar.

Yanina Edith Iturrieta *



* Universidad Nacional de San Juan. Doctoranda en Estudios de Género en la Universidad Nacional de Córdoba y Becaria Doctoral de CONICET. Integrante de la organización Las Hilarias Socorristas en Red. Contacto: yani.iturrieta@gmail.com