Sentidos en disputa sobre el 25N de 2023 bajo el ascenso de la “nueva derecha”: redes sociales y medios de comunicación de Mendoza y Córdoba

Ana Soledad Gil *

Verónica Aráoz **

Resumen

Desde 1981, el 25 de noviembre (25N), o Día Internacional de la Eliminación de la violencia contra las Mujeres, es una fecha insoslayable para los feminismos. Consideramos que, en Argentina, desde 2015 a 2020, el 25N quedó subsumido a otras reivindicaciones como: Ni Una Menos, los debates por la despenalización y legalización del aborto y los paros internacionales de mujeres y diversidades. La pandemia profundizó desigualdades y el temor por el incremento de las violencias de género, asunto que adquirió centralidad y reposicionó al 25N en la agenda feminista. Postpandemia, los mensajes feministas tuvieron un corrimiento de sentido al interpelar a las extremas derechas. Creemos que los feminismos se han convertido en opositores clave en la disputa de sentidos en un contexto de proliferación de discursos de odio hacia estos. En este trabajo analizamos narrativas, decires y construcciones de sentido en cuentas oficiales de Instagram de colectivas feministas, alrededor del 25N. También, la puesta en discurso sobre el tópico, en dos diarios hegemónicos de las provincias de Córdoba y de Mendoza, La Voz del Interior y Los Andes. Nuestra pesquisa asume aportes feministas del punto de vista y conocimiento situado y herramientas del análisis del discurso crítico y social.

Palabras Clave: 25N- sentidos - “nueva derecha” - redes sociales- medios de comunicación

 

Disputed connotations related to 25N of 2023 under the rise of the “new conservative right-wing”: social networks and media in Mendoza and Córdoba

Abstract

Since 1981, November 25 (25N), or the International Day for the Elimination of Violence against Women, is a memorable date for feminisms. We consider that, in Argentina, from 2015 to 2020, 25N was subsumed to other demands such as: “Not one women less”, the debates regarding the decriminalization and legalization of abortion and the international strikes of women and diversities. The pandemic deepened inequalities and the fear for the increase of gender violence, which has become a crucial issue, and located the 25N in the feminist agenda. Post-pandemic feminist messages had a shift in meaning by questioning the extreme right wing. We believe that feminisms have become key opponents in the dispute of meanings in a context of proliferation of hate speeches towards them. In this paper we analyze narratives, opinions and meaningful constructions in official Instagram accounts of feminist collectives, about 25N. In addition to this we study the displayed discourse regarding this topic in two very well-known newspapers of Córdoba and Mendoza province, like “La Voz del Interior” and “Los Andes” respectively. Our research considers critical- social discourse analysis tools and feminist contributions from a situated knowledge and perspective.

 

Keywords: 25N- connotations - extreme right wing - social networks – media

 

Introducción

Este trabajo se inscribe en la perspectiva de Comunicación/Género(s)/Feminismos y analiza por un lado, las narrativas, decires y construcciones de sentido expresados por distintas colectivas feministas en la red Instagram, alrededor del 25N de 2023. Por otro, la puesta en discurso sobre ello, en dos de los diarios hegemónicos de las provincias de Córdoba y de Mendoza, La Voz del Interior y Los Andes, respectivamente. El propósito es estudiar el proceso de mediatización en torno al 25N durante el 2023, año electoral en donde se reconfigura el entramado político e ideológico en Argentina y asume al gobierno nacional una fuerza de extrema derecha.

Partimos de interpretar que, desde el año 2015, el 25N quedó subsumido a otras movilizaciones y demandas como Ni Una Menos, las vigilias y los debates por la despenalización y legalización del aborto y los paros internacionales de mujeres, feministas y de la diversidad, en cada ocho de marzo[I]. Luego, la crisis pandémica profundizó desigualdades y acrecentó el temor por las violencias de género en un contexto de confinamiento social, asunto que adquirió centralidad y volvió a posicionar al 25N como fecha importante de la agenda política de género/feminista. Pospandemia, los mensajes construidos por organizaciones y colectivas feministas, comenzaron a interpelar a las extremas derechas, cuestión que se vislumbra como un corrimiento de sentido. Al respecto, nuestro supuesto es que, dada la proliferación de discursos de odio hacia mujeres y colectivos de la diversidad, los feminismos, sus reclamos y acciones se han convertido en opositores clave en la disputa por los sentidos sociales.

Sobre la fecha elegida, a partir de 1981, el 25 de noviembre (25N) es insoslayable en el calendario de género/feminista ya que refiere al Día Internacional de Eliminación de la violencia contra las Mujeres[II]. En ese año se celebró en Bogotá, Colombia, el Primer Encuentro Feminista Latinoamericano y del Caribe y fue allí donde se decidió, recordando el feminicidio de las hermanas Mirabal (Las Mariposas)[III] a manos de la dictadura de Leónidas Trujillo en República Dominicana. Se trata de una jornada histórica y política de conmemoración a nivel mundial que promueve movilizaciones, reclamos y reflexiones en torno a las violencias de género.

En los últimos años, los feminismos se han instituido como sujetos de enunciación -voces autorizadas- en torno a demandas de derechos para mujeres y diversidades. También, se han convertido en uno de los blancos predilectos a los que van dirigidos los ataques y críticas de las derechas radicalizadas (Semán, 2023) que profesan el retorno a valores tradicionales en materia de género, poniendo en riesgo la conquista de derechos. Bajo este entramado de discursos, nos preguntamos ¿cuáles son los sentidos que construyen las colectivas feministas en sus cuentas oficiales de Instagram en torno al 25N de 2023? y ¿cuál es la puesta en discurso que llevan a cabo los medios tradicionales al respecto, en 2023?

La emergencia de derechas radicalizadas (Semán, 2023) es un fenómeno de carácter mundial. El gobierno de Donal Trump en Estados Unidos o el de Jair Bolsonaro en Brasil, son ejemplos recientes en nuestro continente. En Argentina, la expresión de esta corriente es la Libertad Avanza (LLA), encabezada por Javier Milei quien ganó el balotage de las elecciones presidenciales de 2023 con el 55,69% de los votos. Córdoba y Mendoza son las dos provincias en donde más caudal de votantes obtuvo esta fuerza política, superando el 70%.

LLA se define como “liberal libertaria”[IV], y busca acentuar las críticas al Estado, a la economía y a los políticos (Semán, 2023). Parte de su dispositivo discursivo nuclea expresiones que denuncian la “ideología de género”, posiciones en contra del aborto, niegan la brecha y desigualdad de género, configurando como enemigo o adversario a ciertos[V] feminismos. Esta derecha presenta a los feminismos como “un poder que impone una perspectiva dominante, a ser combatido por quienes se resisten a esa imposición que alcanza lo más íntimo” (Peñamarín, Amman y Parra, 2021, p.13).

Dicho lo anterior, el enfoque metodológico que implementamos es el análisis de discurso desde una perspectiva crítica y social (Voloshinov, 2009; Angenot, 2010; Verón, 1987a) y desde el punto de vista y conocimiento situado feminista (Haraway, 1995; Smith, 2012; Bach, 2010). El corpus que analizamos está conformado por piezas informativas de los portales digitales de los medios periodísticos de Córdoba y Mendoza y por posteos de las cuentas oficiales de Instagram de colectivas feministas de ambas provincias. Recolectamos y seleccionamos el material publicado durante el mes de noviembre de 2023, a través de los signos, en términos de Voloshinov (2009): 25N, violencia de género, violencia contra la mujer y Día Internacional de la Eliminación de la violencia contra las Mujeres.

Comunicación, Género y Feminismos

Para empezar, nos referimos a las “articulaciones posibles entre la comunicación y el género, en tanto campos eclécticos, históricamente subalternizados por la hegemonía científica” (Actis y Díaz Ledesma, 2020, p. 143). En sintonía con Actis y Díaz Ledesma, entendemos que la comunicación como toda práctica social “involucra diversos procesos de producción de sentidos y una trama de disputas por su contingente estabilización” (2020, p.145).

Fue con la irrupción de las mujeres en ámbitos académicos y científicos que el punto de vista de género/feminista produjo un deslizamiento en lo que se entendía por “verdad científica” y cuestionó radicalmente la mirada neutral y universal implicada en la producción de todo tipo de conocimientos. Se devela el sesgo genérico (masculino), clasista y racial.

Dice Mabel Bellucci,

Si el conocimiento ha sido en su mayor parte producido por los Hombres, ¿es la Ciencia la visión parcial del hombre de la realidad, a pesar de que esta visión parcial haya sido elevada a la categoría de universal? [...] si las mujeres hubieran participado en la construcción de conocimiento, ¿cuáles serían sus supuestos, sus criterios de cientificidad, sus lógicas, sus metodologías? (1992, p. 30).

Para seguir, el campo en el que nos ubicamos, atiende a discursos, sentidos, narrativas, imágenes, productos audiovisuales y aborda temas y/o problemas de género/feministas. No hay que olvidarse de las audiencias, sus derechos, su accionar y sus posibilidades de incidencia en las agendas mediáticas. La relación entre medios, mujeres, diversidades, los sentidos construidos y las propias prácticas periodísticas-comunicacionales, tiene larga historia y ha sido abordada desde distintas perspectivas (Laudano, 2010). A lo largo del tiempo los movimientos de mujeres y feministas se han relacionado – o no –con este campo desde diferentes posiciones.

Tal como se ha aseverado, en los últimos años se ha visto el desarrollo de vasta bibliografía relativa a comunicación con enfoque de género. Diferentes colectivas de mujeres, agrupaciones feministas, periodistas con visión de género y comunicólogas especialistas en género han contribuido al campo de estudio (Fernández Hasan y Gil, 2016).

Según Actis y Díaz Ledesma,

El campo de la comunicación y el de los estudios de género acuden a un llamado en el que converge un axioma vertebral: la comprensión de los procesos sociales como un entramado sistema de regulaciones culturales en cuya constitución se condensa la pugna por la dominancia o subalternidad.  (2020, p.147).

 

A grandes rasgos, se trata de entender el género como categoría de análisis transversal en todo el proceso comunicativo; es decir, que toda la información y la totalidad de los temas en diferentes secciones sean tratadas desde esta perspectiva.

La perspectiva de género y comunicación supone incorporar en los medios una nueva mirada, intervenir para mejorar el punto de vista hegemónico. Ese punto de vista hegemónico que es históricamente masculino y occidental (F. Plaza y Delgado, 2007, p.8). Algunas de las recomendaciones más socializadas para una comunicación con enfoque de género son aquellas referidas a un tipo de producción atenta a desnaturalizar al periodismo más conservador de tipo liberal, con sus estandartes de objetividad, prensa amarilla y construcción de la noticia con un varón siempre sujeto de la acción, informante clave, especialista, protagonista de la noticia o referente único (Fernández Hasan y Gil, 2016, p. 272).

En este marco, puede entenderse la distinción entre el género como categoría descriptiva, donde se visibilizan las desigualdades entre varones, mujeres y diversidades; como categoría analítica que permite interpretar estas desigualdades y como categoría política que posibilita entender las formas de distribución de poder entre los géneros, y en consecuencia, la discriminación y subordinación de las mujeres y personas feminizadas en la sociedad (Gil, 2016). En otras palabras, el concepto supone entender que el sistema tal cual está construido es desigual para las mujeres y las personas feminizadas. Refiere a la división sexual del trabajo, las normas y sanciones de género, los estereotipos donde lo femenino está subrepresentado o llevado al lugar de Objeto mientras que lo masculino está sobrerepresentado y ocupa el lugar de Sujeto. En esto, los discursos que legitiman lo dicho, tienen un rol central. El género, es una perspectiva crítica (F. Plaza y Delgado, 2007, p. 9).

Finalmente, el asunto del lenguaje y de los usos que hacemos de él resulta primordial. En el lenguaje se revelan valores y se evidencian las relaciones de poder existentes, dando voz o silenciando, nombrando u ocultando. Queda en evidencia, la materialidad del mismo y los efectos en las experiencias concretas de las personas (Gil y Morales, 2020).

Desde #NiUnaMenos hasta la pospandemia

Podemos afirmar que la cobertura de noticias que se relaciona con la agenda de género, se ve influenciada por la coyuntura. Desde el 3 de junio de 2015, con la expansión del movimiento feminista/de mujeres en Argentina con motivo de lo que se conoce como Ni Una Menos, los temas relacionados con violencia de género/femicidio encontraron en los medios un lugar privilegiado -con impacto en políticas públicas- desplazando al resto de los temas urgentes (prostitución/trata y derechos sexuales y reproductivos/aborto) y otros relativos a género como tareas de cuidado, educación, trabajo y migraciones.

En 2018 se produjo, con motivo del tratamiento en el Congreso Nacional del proyecto de despenalización y legalización del aborto y de un contundente Segundo Paro Feminista (Fernández Hasan, 2019), una apertura en los medios de comunicación hacia una agenda más amplia que abarcó temas como aborto, pero también otros como educación sexual integral, acoso sexual callejero, acoso laboral, abuso, tareas de cuidado y techo de cristal. Frente a esta coyuntura, en este trabajo entendemos que la efeméride del 25 de noviembre como día específico y especial para las violencias quedó subsumida y, por qué no, casi invisibilizada.

En marzo de 2020, luego del cuarto Paro Internacional Feminista convocado para el 8 de marzo en el que las consignas y reclamos se basaron, mayoritariamente, en la despenalización y legalización del aborto en el país[VI], irrumpió la pandemia por Covid-19. Mientras todos los ámbitos de la vida eran trastocados por las medidas de aislamiento obligatorio y distanciamiento social, entre las recomendaciones de cuidado, el miedo, las muertes y la sobre-información, los medios de comunicación y el periodismo, asumieron un papel destacado como actores sociales y políticos. De manera resumida, se produjo una invisibilización de mujeres y diversidades junto a un retroceso en lo referido al tratamiento de temas/problemas desde una perspectiva de género/feminista. Las alianzas, el trabajo conjunto en las redacciones, en espacios comunicacionales y en las calles, entre el movimiento, las agendas y las periodistas feministas, se interrumpieron de manera imprevista y la virtualidad no pudo suplir del todo esa sinergia que venía produciendo cambios (Gil, 2024).

En este marco, los movimientos feministas y de las diversidades, temieron el incremento de las violencias de género y de las tareas reproductivas sobre mujeres y personas feminizadas, dado el lema hegemónico “quédate en casa”, que, si bien buscaba frenar los contagios ante un panorama desolador, de incertidumbre y muertes, para muchas personas significaba quedarse encerrada con su agresor, sobrecargarse de tareas domésticas y de cuidado, perder su fuente de trabajo (para aquellas que no tienen un trabajo registrado, por ejemplo), etc.

Frente a esto, las redes sociales jugaron un rol importante bajo lo que conocemos como ciberactivismo, una nueva forma de activismo y de movilización en el espacio digital a través de las TICs. Como dice Claudia Laudano (2016) “el ciberfeminismo es la utilización de las TICs por parte de grupos de mujeres y feministas para subvertir el sexismo e instituir visiones propias de acuerdo con sus posibilidades materiales y simbólicas”.

Así fue que, además de las fechas importantes del calendario feminista como el 28 de mayo por la salud de las mujeres, el 3 de junio por Ni Una Menos y el 28 de septiembre por la legalización y despenalización del aborto, el 25 de noviembre, Día Internacional de Acción por la Eliminación de la Violencia hacia las Mujeres, fue asomando nuevamente y adquiriendo otros sentidos observables en las comunicaciones que las colectivas feministas y de las diversidades realizaban en sus redes sociales y también, en la puesta en discurso de algunos medios de comunicación tanto tradicionales como contrahegemónicos.

Pospandemia, los feminismos volvieron a ocupar las calles con movilizaciones en fechas clave para su agenda política y a mediatizar sus reivindicaciones en relación a las políticas ineficientes en materia de género, en contra del imperialismo, el capitalismo, el extractivismo y la justicia patriarcal. Este retorno al espacio urbano y mediático se dio en el marco de una coyuntura polarizada por las elecciones presidenciales que tuvieron lugar en 2023. En noviembre de ese año, Milei fue elegido presidente de la Nación. Cabe decir que su partido se originó durante la pandemia, en contra del aislamiento social y en el espacio mediático digital. Desde entonces, estas derechas radicalizadas (Semán, 2023) gestaron un dispositivo de producción de discursos en donde la “ideología de género”, la oposición al aborto, la negación a las brechas de género y los feminismos fueron configurando un “otro” a combatir. Durante el debate presidencial ante una pregunta de Myriam Bregman sobre si negaba o no a los femicidios, Milei respondió: “¿Qué femicidios? igualdad ante la ley” (FiloNews, 2023).

Mediatizaciones. Acontecimiento.

La mediatización es un proceso de producción de lo social a partir de la transformación del sentido y de su materialización (Cingolani, 2013). Retomando a Verón (2001), este proceso hace referencia a que los dispositivos de producción de sentido estructuran las prácticas sociales e instituciones. En sociedades altamente mediatizadas o hipermediatizadas (Carlón, 2020) como las nuestras, los medios tradicionales y las plataformas mediáticas participan de la configuración de lo público o aquello que llamamos realidad colectiva (Fernández, 2018).

El estudio de discursos en plataformas mediáticas de colectivas feministas y de medios tradicionales sobre el 25N de 2023, es un modo de acceder o tomar contacto con un momento del debate público. En particular, sobre las violencias de género y los feminismos en una coyuntura atravesada por la circulación de discursos de odio por parte de derechas radicalizadas (Semán, 2023) hacia estos sectores.

El estudio de un acontecimiento, como el 25N de 2023, es preciso hacerlo contemplando la complejidad que adquiere el ecosistema de medios en la actualidad. Carlón (2020) señala que la particularidad del contexto contemporáneo es la coexistencia de dos sistemas mediáticos: las redes sociales mediáticas y los medios tradicionales. Las interrelaciones y desplazamientos de discursos entre estos sistemas producen transformaciones en la comunicación, saltos o cambios de sentidos (Carlón, 2020). Es decir, cada sistema mediático (Carlón, 2020) produce distintos regímenes de visibilidad (Raimondo Anselmino, 2020).

Las redes sociales mediáticas habilitan la emergencia de enunciadores individuales, amateurs o anónimos (Carlón, 2020) desplazando a los medios tradicionales y a las instituciones como únicos productores de sentidos. De acuerdo a la posición enunciativa, estos enunciadores son capaces de producir colectivos de identificación, “cuadros identitarios que agrupan a los actores individuales” (Verón, 1997, p. 14-15). Por su parte, los medios tradicionales tienen la capacidad de construir y escalar los hechos sociales de manera colectiva. Como dice Raimondo Anselmino (2020), aún en sociedades hipermediatizadas, los medios tradicionales siguen siendo el lugar en donde se fabrica la actualidad en tanto experiencia colectiva.

 

Elecciones metodológicas

En consonancia con los apartados precedentes y como adelantamos en la introducción, consideramos los aportes teórico-epistemológicos del punto de vista y el conocimiento situado feminista dado que nos ubica en una perspectiva crítica al conocimiento neutral y desencarnado, donde la experiencia cobra relevancia en la construcción de conocimiento. La línea de investigación que se dio bajo el nombre de “conocimientos situados” surgió para indagar en las implicancias epistémicas del género y en las consecuencias científicas de una racionalidad masculina que se enmascara de neutralidad y universalidad (Smith, 2012, Harding: 1998). Para Ana María Bach (2010) son tres las dimensiones de importancia al incorporar las premisas del punto de vista: porque conforma y es formado por la subjetividad; por su fuerza política y su papel para la praxis y por el papel cognoscitivo que juega.

Asimismo, se toman las herramientas del análisis del discurso desde una perspectiva crítica y social. Partimos de una mirada dialógica del lenguaje (Voloshinov: 2009), poniendo énfasis en reconocer desde dónde se habla, quién lo hace, con qué sentido u orientación, etc., para evitar, precisamente, la falacia de hablar desde "ningún lugar". Para Voloshinov, todo signo es ideológico, está estructurado socialmente y llega a ser “arena de lucha de clases” (2009: 47). La clase dominante busca adjudicar al signo ideológico un carácter eterno por encima de las clases sociales, convirtiéndolo en un signo “monoacentual” (2009, p. 48). En sintonía, Marc Angenot indica que la ideología “está en todas partes, en todo lugar” (2010, p. 27). Este autor sostiene como “decible global” todo lo que se dice -y no se dice- sobre algo en un determinado momento histórico. Esto, junto a la idea de “umbrales de decibilidad” nos permite analizar corrimientos, oclusiones, aperturas y/o deslizamientos en los sentidos construidos sobre el objeto de pesquisa.

Finalmente, Eliseo Verón sostiene que todo fenómeno social es un proceso de producción de sentido, es decir, un conjunto de huellas que están en lo textual, bajo la forma de operaciones discursivas. Así, toda producción de sentido es necesariamente social y todo proceso significante se describe y explica según las condiciones sociales productivas (Verón, 1987b:125). Operativamente, completan las categorías de nuestro análisis los “tres destinatarios” que propone Verón (1987a): prodestinatario, aquel que comparte lo que se expresa, adhiere a lo que el propio enunciador habla, los une una creencia presupuesta; paradestinatario, aquel que, por el momento, tiene suspendida la creencia y es el blanco al que se intenta convencer y persuadir; y contradestinatario es aquella construcción discursiva con la que se polemiza. Es decir, desde lo discursivo hay una inversión de la creencia. Todo discurso apunta a un contrincante. Son los sentidos que se disputan.

Acerca del corpus, la selección ha sido intencional considerando la incidencia y visibilidad que tienen a nivel local y nacional tanto los medios como las cuentas oficiales de Instagram de las colectivas feministas de cada provincia. Específicamente, está conformado por piezas informativas y por posteos publicados durante el mes de noviembre de 2023, seleccionados y sistematizados en una matriz de datos especial, bajo los signos, en términos de Voloshinov (2009): 25N, violencia de género, violencia contra la mujer y Día Internacional de la Eliminación de la violencia contra las Mujeres.

La Voz del Interior y Los Andes: discursos y construcciones de sentido en torno al 25 de noviembre de 2023

Antes de interiorizarnos en el análisis detallado de las piezas informativas de cada medio, presentamos una descripción de cada uno, a modo de contextualización y economía política de los mismos.

El sistema de medios cordobés está conformado por varias empresas de comunicación de extensa trayectoria. La Voz del Interior es el principal periódico de la segunda ciudad más poblada de Argentina, es uno de los sitios con mayores visitas del interior y en 2023 se ubicó entre los más leídos a nivel nacional (La Voz, 2023). Este diario tiene 120 años de antigüedad y fue fundado el 15 de marzo de 1904 por Silvestre Rafael Remonda y Juan Dionisio Naso. Actualmente es propiedad de la Compañía Inversora de Medios de Comunicación S A (CIMECO) en donde el Grupo Clarín es el mayor accionista.

La Voz es una empresa multimedia que distribuye contenidos en múltiples soportes. La edición impresa y online se complementan junto con: otros servicios que brinda a distintos medios argentinos y del exterior, productos audiovisuales, beneficios a sus 120 suscriptores y el desarrollo de eventos (Sociedad Interamericana de prensa, 2024). Este medio se centra en información de interés general mediante coberturas a nivel local, nacional e internacional, cuenta con secciones diarias y especializadas, y publica suplementos especiales.

En Mendoza, el Grupo Clarín controlaba al principal periódico, mientras que, el resto de los medios de comunicación, está dirigido por el Grupo Uno. Específicamente, el diario Los Andes fue creado por Adolfo Calle el 20 de octubre de 1882. Luego de la muerte de su fundador, en 1918, quedó en manos de sus herederos hasta 1997, cuando ingresó a su paquete accionario CIMECO, una compañía mediante la cual Clarín y La Nación, adquirieron diferentes diarios del interior del país. Luego invitaron a participar al Grupo Correo de España.

Los Andes[VII], es el principal diario de una provincia tradicional y conservadora e incide fuertemente en el discurso social de los y las mendocinas, sobre todo por las réplicas que encuentra en otros medios como radio, televisión, internet y redes sociales.

Si bien en este apartado estamos mencionando sólo a dos medios de dos de las provincias del país, es importante dejar sentado que, según Tamara Smerling, “el grado de concentración del mercado de medios de comunicación en el “interior” del país es extremadamente alto” (2013, p. 82).

Análisis sobre las construcciones de sentido en torno al 25N

Diario La Voz

Analizamos cinco notas del portal online de La Voz. En tres del total, aparece el signo 25N al inicio del titular: “25N: se realizaron numerosas movilizaciones en Córdoba y en distintos puntos del país”. Los dos puntos delimitan y producen el efecto de sentido de detener el discurso para llamar la atención y englobar todo lo que sigue después, asociado al texto precedente. Por su parte, solo dos de las piezas informativas están firmadas por Virginia Digón, periodista especializada en perspectiva de género y derechos humanos, y el resto por Redacción La Voz, construyendo un enunciador impersonal. A continuación, analizamos el material siguiendo la cronología en la que fueron publicadas.

La primera nota, publicada el 23 de noviembre, se titula “25N: se realizarán numerosas movilizaciones en Córdoba y en distintos puntos del país”. En esta pieza informativa, aparecen operadores de cuantificación mediante adjetivos como: “numerosas”, “distintos”, “múltiples”, “diferentes” que tienden a magnificar la diversidad y el alcance de las movilizaciones: “en todo el país”. Así, se genera un efecto de hiperbolización a partir del énfasis en la cantidad de personas y la diversidad de actividades en el día de la convocatoria. También, alude a acciones colectivas previas de los feminismos asociando la movilización de noviembre 2023 a una historia, a través de expresiones anafóricas que aparecen en citas textuales de las fuentes que se retoman como: “Seguimos organizadas, organizades…”, “Porque seguimos Defendiendo los Derechos ganados en las calles…”. Al respecto, construye a los feminismos como colectivo organizado, que tiene capacidad de acción, de carácter federal y con incidencia a nivel nacional. A la vez, inscribe las acciones del 25N 2023 al imaginario construido en torno a movilizaciones feministas masivas de alcance nacional e internacional como Ni una menos.

En esta nota, las fuentes son organizaciones sociales feministas de distintas partes del país acentuando el carácter federal de los feminismos. Las citas textuales de estas fuentes refieren al contexto político de avanzada de las derechas sobre los derechos conquistados y las instituciones abocadas a erradicar la violencia de género. Al respecto, estas citas aluden a declaraciones realizadas por, en ese momento, recién electo presidente de la Nación Javier Milei.

En citas textuales de organizaciones y, en otras partes del texto donde no se explicita la fuente, se recuperan distintas consignas de la marcha que cargan de sentido la acción colectiva y van configurando el contradestinatario como la derecha radicalizada, LLA y Milei: “Ni un paso atrás”, “Ni un derecho menos, ni un ajuste más”, “Nos tenemos” y “En defensa de nuestros derechos”, “Juntes somos poderoses!, “Decimos ni un derecho menos, ni un ajuste más!”, “Ni Un Paso Atrás”. Estas consignas presentan un componente prescriptivo que opera interpelando, mediante el uso del “nosotros inclusivo”, al prodestinatario: feministas.

La segunda nota del 24 de noviembre se titula “25-N: Continúa la búsqueda activa de 35 mujeres sin paraderos conocidos en Córdoba” y articula distintos tópicos: la violencia de género, el 25N y la desaparición de mujeres. La sección “Ciudadanos/Violencia de género” define el enfoque y enmarca, desde el inicio, el resto del contenido desarrollado, estableciendo a la desaparición de mujeres como parte de la problemática más amplia de la violencia de género.

En esta nota, la fuente es un informe de una organización social y política y de una productora de noticias y contenidos de Córdoba. De éste, se recuperan citas textuales de los autores que se posicionan en contra de Milei: “El presente informe se da en el marco de la enorme preocupación ante los anuncios del gobierno nacional…”, “A las y los autores del presente informe les preocupan estos anuncios y que el estado y sus gobiernos se desentienden de la lucha contra las violencias hacia las mujeres…”. Estas citas aluden a declaraciones del presidente en contra de las políticas de género. Además, expresan un clima de situación al vehiculizar sentimientos como: “enorme preocupación”, “cercenar derechos adquiridos” y “les preocupan estos anuncios”. Esto va configurando un contradestinatario de derecha. 

La tercera nota del 25 de noviembre se titula: “Ni un derecho menos”, el fuerte llamado del movimiento feminista en el 25N”, de la sección “Ciudadanos/Córdoba” que ancla el contenido a lo local. Es una crónica que narra el desarrollo de la marcha, otorgando sentido a esta acción en un contexto social particular. Acompañan el texto fotografías testimoniales (Verón, 1997) de la movilización. Esta pieza informativa está firmada por Virginia Digón, inscribiendo su perspectiva y enfoque desde el título cuando dice “fuerte llamado” y, en otras partes del cuerpo, cuando menciona: “visibilizar el reclamo que se hace escuchar cada 25 de noviembre a nivel mundial”, “El clima de incertidumbre y tensión por el avance de la ultraderecha…”, “El contexto político y social es tenso por distintos hechos de amenazas y persecuciones”. Estos fragmentos explicitan el posicionamiento del enunciador sobre la marcha que caracteriza como de gran alcance (“fuerte llamado”, “se hace escuchar…a nivel global”) y, a la vez, configura un clima de situación mediante la expresión de emociones sobre el contexto político: “incertidumbre”, “tensión”, “contexto político y social es tenso”, “defender los derechos conquistados en los últimos años”.

Las fuentes en esta crónica son organizaciones sociales feministas y de personas autoconvocadas a la marcha. Las citas textuales evidencian las motivaciones por movilizarse en esa fecha bajo una coyuntura política particular: “Conocemos agrupaciones y organizaciones que defienden a pedófilos que están acompañando al presidente electo Javier Milei. Con un gobierno negacionista de los derechos de las mujeres, no creo que nuestras denuncias encuentren un final más feliz para nuestros hijos”. Estos fragmentos hacen alusión de manera negativa a las declaraciones de Milei sobre eliminar instituciones y políticas que abordan la violencia de género.

Aunque en esta nota no se emplea el lenguaje inclusivo, ni el “nosotros inclusivo”, sino un lenguaje neutral, se tiende a valorizar la movilización y a los sectores feministas. El prodestinatario que se construye en esta nota son feministas, mujeres, identidades disidentes, familiares de víctimas de violencia de género, femicidios, de abuso sexual infantil y organizaciones sociales feministas. El paradestinatario son sectores afines a estas demandas que están en contra de Milei, pero que no se identifican como feministas y adhieren a la lucha contra la violencia de género.

La cuarta nota del 25 de noviembre se titula “25-N: en 2023, van 19 mil llamados y 1.300 denuncias al Polo de la Mujer por violencia de género y familiar”, firmada por Virginia Digón. Es un informe que describe las funciones y actividades que desarrolla el Polo de la Mujer del Ministerio de la Mujer de la Provincia de Córdoba. Las fuentes recuperadas son oficiales y públicas.

Aunque en ningún momento se explicita, esta publicación se da en el marco de la campaña de desprestigio de Milei y su partido en torno a las instituciones y políticas públicas orientadas a abordar la violencia de género. Al exponer, en esta pieza informativa, las tareas que realiza el Polo y dar cuenta en cifras o resultados el abordaje que lleva a cabo, se valoriza la institución y su función, estableciendo una posición a favor de la continuidad de este tipo de espacios estatales y públicos. “Una herramienta fundamental”, “la atención integral a las víctimas de violencia machista es clave”, expresan valoraciones mediante los adjetivos calificativos “fundamental” y “clave”. Dentro del apartado que se subtitula “Reconocimiento”, se destaca la premiación del Polo como iniciativa regional. De esta manera, se va configurando el contradestinatario.

Se destaca el empleo de cifras para cuantificar, hacer visible e inteligible, el alcance que tiene el Polo. A esta operatoria de producción de un saber en torno a una problemática pública, Trebisacce y Varela (2020) la llaman política de cifras. En el título, en la bajada y en el cuerpo del escrito se retoman cifras: “…van 19 mil llamados y 1.300 denuncias al Polo de la Mujer por violencia de género y familiar”, “13 femicidios en lo que va de este año”, “hay más de 4.500 dispositivos de botón antipánico (BAP) que están siendo monitoreados y 225 dispositivos duales (tobilleras)”, etc.  

La quinta y última nota es del 25 de noviembre y se titula: “Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer: por qué se celebra cada 25 de noviembre”, dentro de la sección “Servicios/Efemérides”. Aunque focaliza en la efeméride del 25N, incluye un listado de otras fechas, conmemoraciones y hechos relevantes en la historia que tiene, en general, a varones como protagonistas. Desde el inicio configura un destinatario que no se identifica como feminista y que desconoce sobre la problemática; en una cita alude a una entidad más amplia que al colectivo de identificación como son los “miembros de la sociedad”. Adopta como fuente la Declaración sobre la eliminación de la violencia contra la mujer emitida por la Asamblea General de la ONU en 1993 que aparenta neutralidad política y partidaria y que tiene reconocimiento y legitimidad social.

La Voz enlaza la violencia de género y el 25N a otras demandas como el abuso sexual infantil, la desaparición de mujeres, la ESI. Este día es construido como instancia de visibilización de la problemática y como expresión de organización de los feminismos. Los feminismos son configurados como sectores integrados por familiares de víctimas de violencia de género, mujeres e identidades de la diversidad sexual, por múltiples organizaciones sociales de anclaje local, pero también de carácter internacional, con capacidad de convocatoria y de posicionarse colectivamente frente a la coyuntura política. Esto lo observamos en las imágenes de las notas que mediante planos amplios muestran una pluralidad de mujeres, familiares de víctimas, sindicatos y organizaciones con consignas como “Mi miedo se volvió fuerza”, “Justicia por Yeraldine”, etc.

El diario recoge distintas citas textuales que expresan una posición contraria a las declaraciones antiestatales de Milei. La Voz construye una mirada institucionalista sobre el abordaje de esta problemática y valoriza la función y el trabajo que desarrollan distintas instituciones públicas. Por otro lado, las organizaciones sociales feministas se volvieron fuentes privilegiadas y voces autorizadas para hablar sobre el 25N. Se destacan este tipo de fuentes por sobre otras oficiales, a diferencia de lo que acontece, generalmente, en el tratamiento de publicaciones sobre femicidios (Fernández Hasa y Gil, 2019).

Diario Los Andes

Para el caso de Los Andes, se realizó una búsqueda de noticias en su versión digital. Bajo los signos ya señalados, el diario publicó 4 notas.

El 25 de noviembre (día de la efeméride), Los Andes tituló “Cientos de mujeres coparon las calles de Mendoza en la marcha por el Día de Lucha contra la Violencia de Género”. No está firmada, no obstante trabaja con construcciones discursivas que tienen que ver con el día y con el problema: “visibilizar la violencia”, “trabajar para su prevención y erradicación”. La nota está acompañada de una imagen en la que se ven mujeres diversas marchando bajo el epígrafe “Cientos de mujeres marcharon en Mendoza por el Día de Lucha contra la Violencia de Género”. Se destaca la consigna “ante la derecha, el ajuste y el FMI, hay resistencia feminista” y pintan el acontecimiento, a través de la siguiente construcción de sentido “las calles se llenaron de pancartas, carteles y una marea violeta que copó la avenida San Martín. Hay un video, más fotografías y aunque el texto es escaso, no dejan de mencionar el tema como problema, la necesidad de justicia, entre otras valoraciones, y culminan recordando a las hermanas Mirabal. El mismo día, habían publicado antes de la concentración y marcha, la convocatoria tomando como voz autorizada al NUM Mza dado que replican la imagen que la colectiva había posteado en sus redes junto a la información de la misma. De hecho sostiene “desde Ni Una Menos de Mendoza hicieron un llamado a salir “a defender nuestros derechos en las calles”.

El 27 de noviembre publicó el título “Feministas lanzaron una canción contra Milei: “Sororidad combativa, las calles son nuestras”, no está firmada, muestra imágenes y un video que asocia la marcha y los reclamos contra las violencias al gobierno de Milei. La bajada dice “Las mujeres que participaron de la marcha por el Día contra la Violencia de Género crearon un hit contra el presidente electo. El video se hizo viral”. Más allá de la visibilidad del mensaje, la publicación y el hecho de hablar de “hit”, corre el foco de la problemática. El tema central de la nota no es la violencia ni el 25N sino la canción que “las feministas” crearon “contra” el presidente Milei. Luego, avanza y se refuerza lo dicho en el cuerpo de la noticia: “La protesta no fue ajena a la coyuntura política del país. Es que llevó la consigna “ante la derecha, el ajuste y el FMI, hay resistencia feminista”. Y así se notó en las calles, donde las feministas interpretaron un hit contra Javier Milei”. El sentido final que se construye llega a tonos burlescos para con las mujeres y personas feminizadas que se manifestaron con las violencias de género en un país en el que, casi a diario, ocurre un femicidio.

El 28 de noviembre de 2023 se publicó una nota bajo el título “Alianzas que construyen”: YPF y ONU Mujeres se unen para colaborar con la eliminación de la violencia contra las mujeres” en la cual se alude a la fecha en estudio en la bajada de la misma. La nota es de corta extensión, no está firmada y sólo refiere a la “alianza” y “compromiso” para “erradicar” las violencias.

Por otro lado, bajo el signo “violencia de género publicó” aparece solo una noticia con el título “El Quintanilla conmemora el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer” en la que da cuenta de tres obras que estarán en ese teatro mendocino y “que invitan a la reflexión y concientización de la violencia de género en sus manifestaciones no solo física, sino también psicológica, verbal, económica, simbólica, etc.” La pieza es correcta en cuanto a la mirada de género y, en todo caso, el arte lo refuerza para informar sobre determinados temas como son las violencias de género.

A modo de síntesis el medio se muestra “neutral” en la mayoría de las notas que publicó sobre el 25N, exceptuando aquella en la que, al hablar de “hit” orienta un sentido burlesco para con las mujeres, diversidades y por sobre todo, para con el feminismo.

La fecha estuvo presente en el diario más importante de Mendoza, hubo fotos, videos, la voz autorizada fue el NUM Mza y así fue que hicieron alusión al corrimiento de sentido respecto de los reclamos hacia la extrema derecha que acababa de ganar en el país. Dicho en palabras de Verón, el prodestinatario fue el feminismo mientras que el contradestinatario se erigió en la figura de Milei y todo su discurso neoconservador, destructivo de los avances en derechos, conseguidos hasta el momento. El paradestinatario se ubica en las construcciones que mencionan a las violencias, su visibilidad y la necesidad de justicia.

Colectivas feministas de Córdoba y Mendoza en la red Instagram: disputas y corrimientos de sentido

Descripción y análisis de las cuentas seleccionadas - Córdoba

Córdoba presenta una multiplicidad de organizaciones sociales que participan de la diversidad de luchas y reclamos feministas. El 2015, momento de quiebre para estas reivindicaciones, provocó la emergencia de espacios de discusión, conformación colectiva y debate en torno a la violencia machista y otras demandas históricas de estos sectores. En este contexto, surgieron dos espacios: Ni una menos Cba (Córdoba) y la Asamblea Ni una menos Cba (Córdoba) (Fernández, 2021).

Ni una menos Cba emerge a partir del colectivo de Buenos Aires, pero con injerencia local. Este espacio de denuncia pública y condena a los femicidios está conformado por periodistas, artistas y comunicadoras autoconvocadas. Asamblea Ni una menos Cba se origina a los pocos días de la anterior y según Natalia Di Marco, referente feminista local, en cierta manera sustituyó al Movimiento de Mujeres Córdoba como espacio político asambleario (Anabella Antonelli y Nadya Scherbovsky, 2024). Es un espacio donde concurren distintas organizaciones sociales y partidarias feministas para organizar las marchas, debatir temas y elaborar los documentos que se leen en cada movilización (Brizuela, 2019).

En 2020, las medidas de confinamiento social generaron internas y repercusiones al interior de los sectores feministas de Córdoba. Las discrepancias se dieron en torno a acatar o no las medidas de aislamiento para llevar a cabo la movilización del 3 de junio de ese año. Fernández (2021) menciona que la Asamblea se dividió en dos espacios diferenciados: uno decidió manifestarse ocupando la calle y el otro no, convocando a otras acciones en el espacio digital o en espacios del hogar conectados con el “afuera” como balcones o ventanas.

En el contexto pandémico surgió Alerta Feminista que congrega a diversas organizaciones feministas LGTTBIQ+, estudiantiles, sindicales, políticas, barriales, activistas y militantes de la ciudad de Córdoba. En su cuenta de Instagram, se presentan como una red que integra la marea verde y que busca construir espacios plurales y democráticos en pos de una sociedad inclusiva, igualitaria y con la justicia social.

Análisis

Las tres cuentas oficiales de Instagram de las organizaciones seleccionadas realizan frecuentemente publicaciones sobre diversos tópicos. La comunicación se constituye en una estrategia o un modo de incidir en la agenda pública y mediática e instalar otros sentidos y posicionar temas. Asamblea ni una menos cba realizó seis posteos antes y durante el 25N, Ni una menos Cba un solo un posteo el 22 de noviembre y Alerta Feminista también, pero el 14 de noviembre. Estos posteos refieren a los siguientes signos: 25N, Día Internacional de la Eliminación de la violencia contra las Mujeres, violencia contra las mujeres y violencia de género.

El 14 de noviembre Asamblea ni una menos Cba publicó un posteo convocando a un encuentro en donde hace alusión al 25N, también al 19N, Día Mundial para la Prevención del Abuso Sexual de Niños, Niñas y Adolescentes, y a su postura frente a la situación de conflicto entre Israel y Palestina. Estos signos aparecen recurrentemente en todas las publicaciones que seleccionamos de este espacio, articulando estos tópicos como la implementación de la educación sexual integral (ESI) y el llamamiento en contra de Milei. De esta manera, el 25N funciona como un signo que engloba una diversidad de demandas locales, nacionales e internacionales inclusive, como expresa en otro idioma la etiqueta #FreePalestina. En el flyer aparece la consigna “¡territorios y vidas libres de violencias!” que alude a las reivindicaciones mencionadas al comienzo. En este sentido, empieza a emerger el contradestinatario: sectores imperialistas, colonizadores, Estados Unidos, el Estado de Israel y sectores antifeministas.

Esta organización utiliza el “nosotros inclusivo”: “nos organizamos”, “nos requiere movilizades”, “Nos necesitamos”, “Seguimos en pie de lucha” que permite identificar el prodestinatario de sus mensajes: feministas e identidades de la diversidad y organizaciones sociales. En el caso de la frase “seguimos luchando” remite a acciones colectivas precedentes, inscribiéndose en expresiones pasadas. El prodestinatario se delimita aún más, incluyendo a sectores de izquierda, y, también, el contradestinatario en otro posteo del 16 de noviembre. En ésta publicación, se pronuncia en contra de votar en el balotaje presidencial a Milei o a Sergio Massa, el otro candidato por Unión por la Patria afín al kirchnerismo. El flyer presenta en el centro y en gran tamaño la frase “Milei No” y el posteo, contiene frases como: “¡con liberfachos y antiderechos NADA! Milei no”, “Sabemos que la unidad nacional que propone Massa con Morales… es para ir por más ajuste del FMI … Por eso no depositamos en él nuestra confianza ni apoyo político.”

El posteo del 19 de noviembre es otro pronunciamiento post elecciones y presenta un componente prescriptivo, inscribiendo al enunciador explícitamente en el discurso: “como feministas debemos seguir organizándonos y ampliando nuestro espacio para seguir luchando por nuestros derechos”. Mediante el “nosotros inclusivo” construye el colectivo de identificación que remite al prodestinatario: feministas, mujeres, lesbianas, lesbianes, trans, travestis, bisexuales, no binaries y trabajadorxs. A la vez, amplía el prodestinatario a otras regiones: “DESDE EL SUR GLOBAL AL MUNDO NOS ORGANIZAMOS” dice en mayúsculas para destacar y a modo de “grito” el flyer. De este modo, se construye a los feminismos como expresiones globales, de alcance internacional y no solo local o regional.

El posteo del 20 de noviembre inicia con la frase: “A las calles hoy más que nunca”, acompañado por un puño que hace alusión al tradicional puño feminista que refiere a la lucha y resistencia de los movimientos. En este posteo, como en anteriores, la calle es construida como escenario de encuentro, con una fuerte carga valorativa. La calle se va configurando como una entidad, como un meta-colectivo singular (Verón, 1987a): “sabemos que a todos nuestros derechos los conquistamos en las calles, volvemos a salir para defenderlos”.

El 23 de noviembre, día previo a la movilización, esta organización realiza un llamamiento mediante un posteo y un flyer que muestra mujeres de negro sosteniendo un cartel con las consignas de la marcha en mayúscula: “NI UN DERECHO MENOS, NI UN AJUSTE MÁS. A LAS CALLES CONTRA LA ULTRADERECHA, LOS NEGACIONISTAS Y EL FMI ABAJO AL GENOCIDIO DEL PUEBLO PALESTINO”. El empleo de las mayúsculas alerta sobre lo que se dice. En esta imagen se construye explícitamente el contradestinatario y se refuerza en el texto de la publicación al aludir a declaraciones de estos sectores en contra los feminismos: “han anunciado que vendrán por nuestros derechos, porque pretenden derogar la ley por el aborto legal y quieren amedrentarnos con amenazas hacia nuestras compañeras y referentes”. También van estableciendo un clima de situación al movilizar emociones con expresiones negativas sobre el contradestinatario: “amedrentarnos con amenazas”, “vendrán por nuestros derechos”. Así, se va configurando el binomio nosotros-ellos, feministas-antifeministas, derechas-antiderechas.

El día de la convocatoria, 24 de noviembre, la Asamblea ni una menos Cba publica un posteo con el punto de encuentro para marchar, “Colón y Cañada”, intersección histórica de diferentes convocatorias en Córdoba. El flyer presenta una serie de recomendaciones de seguridad a considerar para quienes se movilizan y se destaca la frase “no nos cuida la policía”, construyendo a esta fuerza como contradestinatario. En este mismo flyer, retoma las consignas de la movilización que engloba esa fecha y que van más allá de la lucha contra la violencia de género como: "basta de ASI", frase acompañada por una imagen de un pañuelo rojo que hace referencia a esta consigna.

Ni una menos Cba publicó el 14 de noviembre de 2023, antes del balotaje presidencial, un pronunciamiento en contra de la fórmula presidencial Javier Milei y Victoria Villarruel. El flyer con el fondo color violeta dice: MILEI NO (en mayúscula), acompañado de los hashtags #NiUnaMenos y #VivxsyLibresNosQueremos, con una pequeña imagen del tradicional puño feminista. Además, en el posteo se expresan explícitamente en contra de Milei, y “rechazo a lxs candidatxs de La Libertad Avanza” siendo parte del contradestinatario. Caracterizando a estos sectores como de la ultraderecha que incitan a la violencia, antidemocráticos y antiestatales. En contraposición, construye un prodestinatario feminista, militante de estas causas, que está a favor del Estado, la democracia y se inscribe dentro de este colectivo al emplear el nosotros inclusivo: “defendemos”, “expresamos”, “todes queremos”. 

Alerta Feminista realizó una publicación luego del resultado del balotaje, el 22 de noviembre en formato invitación. El posteo dice: “Este sábado nos encontramos en el Parque Sarmiento a las 17 hs. para compartir una mateada. Nos encontramos para sostenernos, pensar juntxs los caminos que queremos transitar y seguir construyendo hacia una vida libre de violencias. ¡Lxs esperamos!”. Aunque no de manera explícita, adoptan un posicionamiento frente a la coyuntura política en donde ganó las elecciones presidenciales LLA. Ante este panorama proponen una acción colectiva: “encontrarnos”, “sostenernos”, “pensar juntxs los caminos que queremos transitar”, entre quienes se identifican feministas. 

En los posteos analizados observamos cómo cada espacio configura su identidad y, a pesar de sus diferencias, construyen de manera negativa y como adversario a la derecha radicalizada y a Milei. A la vez, ligaron diversos sentidos al 25N de 2023, al intentar incorporar otras reivindicaciones.

Descripción y análisis de las cuentas seleccionadas - Mendoza

En Mendoza existe una pluralidad de colectivas y organizaciones de mujeres, feministas y de las diversidades. Como ya hemos dicho, luego de una selección intencional y teniendo en cuenta sus capacidades de incidencia, nos referimos a Ni Una Menos Mendoza (NUM Mza), el Observatorio de Violencia Obstétrica (OvoMendoza) y Mumalá Mendoza[VIII].

El colectivo NUM Mza nació al calor del acontecimiento nacional del 3 de junio de 2015. Según Fernández Hasan y Gil, “la colectiva realizó su primera acción   pública   en   octubre   de   2016   cuando   el   gobierno   provincial presentó su candidato, el juez Valerio, a ocupar la   vacante   disponible   en   la   Suprema   Corte   de   Justicia” (2019, p. 501). A partir de entonces, comenzó a consolidarse dentro de las organizaciones sociales y políticas de la provincia.

A diferencia de NUM nacional, en Mendoza la colectiva está conformada    por    más    de    setenta    organizaciones    de    mujeres,  feministas,    sociales,    políticas,    sindicales,    universitarias,    docentes,    estudiantiles    y    de    periodistas    que  delimitan  un  amplísimo  espectro  lo  que  implica  un  reto  constante  de  construcción  política (Fernández Hasan y Gil, 2019, p. 502).

 

OvoMendoza se define tanto en Facebook como en Instagram como una Red de mujeres y organizaciones de la provincia que trabajan a través de distintas acciones, en la promoción de experiencias respetuosas en los procesos de salud de las mujeres y personas gestantes durante el proceso de nacimiento. Existe a nivel nacional la misma organización, OvoArgentina, con quien comparten las líneas de acción, informaciones, etc.

Mumalá es una organización nacional que tiene perfil en distintas plataformas mediáticas como Instagram y Facebook. Además, una página web en la que se lee “¡NOSOTRAS/ES! Somos un movimiento Feminista y Disidente con experiencias de participación social, mixta, política, de derechos humanos y de gestión estatal” y una página de acceso a una biblioteca virtual feminista. Apuestan a un feminismo federal por lo que tienen referentas en casi todas las provincias de Argentina. Mumalá Mendoza se define en su perfil de Instagram diciendo “Mujeres de la Matria Latinoamericana, Organización feminista, Observatorio de datos y feminismo popular”. También publican en Facebook por lo general, los mismos contenidos.

Análisis

NUM Mendoza publicó el 24 de noviembre de 2023 (un día antes de la efeméride en estudio) una placa en tonos violetas y verdes convocando a la marcha del 25N bajo la leyenda “Día de lucha contra la violencia de género”. Es destacable la pluralidad de mujeres y personas feminizadas que aparecen en dicha imagen así como también las “mariposas” en clara alusión a la fecha. El texto que la acompaña dice “¡La libertad y las calles son nuestras!”, orientando la disputa de sentidos, siguiendo a Voloshinov, en torno al signo “libertad”. Aparece en esta frase un contradestinatario, en términos veronianos, que es el partido “La libertad avanza” y pone en discusión qué se entiende/entendemos por libertad. Aquello que los sectores dominantes buscan monoacentuar, aquí se da cuenta de la multiplicidad de actualidades que contiene, buscando abrir el signo, disputarlo, dinamizarlo en la arena de los discursos sociales.

Continúa el posteo diciendo: “En el marco del 25 de Noviembre, Día de lucha contra la violencia de género, nos hacemos eco de la gran marcha federal. Una vez más salimos a defender nuestros derechos en las calles. Ante la derecha, el ajuste y el FMI, hay resistencia feminista. Nos vemos en las calles”. Se confirma de manera contundente lo dicho con anterioridad y, además se nombra al feminismo como la resistencia frente a la avanzada de extremas derechas y de discursos neoconservadores. Al considerar las categorías de Verón, hallamos un “nosotras” en las calles y en las redes, luchando y reclamando y un ellos que son el enemigo ante el cual resistir: derecha, ajuste, FMI. Finalmente, aparecen los datos para la concentración y marcha. Asimismo, la placa ubica el problema de las violencias de género en la lucha por “los derechos humanos”. El deslizamiento de sentido que encontramos tiene que ver con no mencionar la efeméride en el texto (aunque sí en la placa) al tener como principal consigna e intencionalidad, orientar el sentido hacia Milei y todo lo que representa. De todos modos, la extrema derecha, el ajuste y la deuda son asuntos anudados a las violencias de género, contra mujeres y personas feminizadas ya que, como sabemos, operan como contextos de gran hostilidad para el colectivo: se profundiza la feminización de la pobreza, los/as principales perjudicados/as son los/as sectores vulnerabilizados/as, entre ellos, de manera mucho más encarnizada, al tratarse de nosotras/es. Finalmente, la publicación del NUM MZA, no presenta hashtag. No podemos dejar de mencionar que es una colectiva muy activa durante todo el año, presente en las redes y en las calles, atenta ante cualquier vulneración de derechos, está actualizada y produce contenido asiduamente. El NUM Mza es voz autorizada en los medios y en la sociedad.

OvoMendoza realizó una publicación en la red Instagram el mismo 25 de noviembre de 2023 donde lo que más se destaca es la imagen construida como collage, en la cual se destaca una persona gestando y una gran multitud de mujeres en las calles. Aparece la referencia a la efeméride y construyen sentido sobre violencias, desde la violencia obstétrica anudándola con la violencia sexual. Esto se ancla en el texto que acompaña dicha publicación dado que sostiene “La violencia obstétrica es un cruce de múltiples violencias que convergen en la atrocidad de la violencia sexual en nuestras gestaciones y partos”. Es decir, la acentualidad que le dan a la violencia es plural al comprenderla no de manera individual sino en un espiral en conjunto con otras. Sostienen que es una de las violencias más invisibilizadas y utilizan hashtag específicos sobre la fecha y sobre el tipo de violencia que denuncian: #25, #25denoviembrediainternacionalcontralaviolenciadegenero, #violenciaobstetrica.

Finalmente, la organización Mumalá Mendoza publicó en su perfil de Instagram el 22 de noviembre de 2023, “¡Defenderemos el derecho a la salud y a la vida!” bajo el hashtag #Ni Un Paso Atrás. Junto a una imagen en la que se destacan mujeres y diversidades marchando en las calles, publican un comunicado “A horas de las elecciones que dieron como ganadora de la presidencia a la ultraderecha argentina” en el que disputan sentidos en torno a temas como “Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo”, “democracia”, “violencia”. En esta oportunidad, Mumalá no hace referencia al 25N pero sí construye un contradestinatario con el cual batalla en la arena de los discursos y en las calles.

Luego, el 24 de noviembre, realiza una publicación específica sobre la fecha en cuestión, en la cual repite el hashtag #Ni Un Paso Atrás y agrega #25N. La placa de tonos violetas muestra a mujeres en lucha y se ancla en el texto “Cada 25 de noviembre nos movilizamos en el mundo por la eliminación de la violencia de género, homenajeando en las luchas cotidianas a las hermanas Patria, Minerva y María Mirabal, asesinadas en 1960 por la dictadura de la República Dominicana comandada por Rafael Trujillo”. Avanza en un corrimiento de los umbrales de decibilidad, siguiendo a Angenot, al agregar que esta fecha en 2023 tiene una especificidad: “Este año marcharemos con un nuevo gobierno, Javier Milei es presidente, un mandatario cuyas declaraciones en campaña han sido machistas y fascistas”. Luego, afirman que: “Nos costó mucho y muchas vidas lograr que el Estado incluya las problemáticas que sufrimos mujeres y lgbtiq+, ahora nos toca redoblar la lucha para no perder los logros, por eso decimos #NiUnPasoAtrás”, en alusión a un contexto que se ha vuelto doblemente hostil para los derechos de mujeres y diversidades. El contradestinatario construido es el gobierno de Milei frente a un “nosotras” que debe luchar para no perder lo que a lo largo de décadas logramos conquistar.

Las tres organizaciones estuvieron presentes en la red Instagram con motivo del 25N. Cada una con sus especificidades, marcó la importancia de la fecha pero también identificó con claridad como contradestinatario a la extrema derecha y sus discursos neoconservadores, intentando batallar en las construcciones de sentidos para que los derechos conquistados no se pierdan. El corrimiento de sentido tiene que ver con lo dicho. Ya no es solo el reclamo por justicia, presupuesto, leyes, entre otros asuntos, sino también por conservar lo logrado hasta el momento en Democracia y en el Congreso.

Conclusiones

Al inicio de este escrito planteamos que desde 2015, la efeméride del 25 de noviembre (25N) -Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer-  había quedado subsumida a otras demandas como Ni Una Menos, las vigilias y los debates por la despenalización y legalización del aborto y los paros internacionales feministas, de mujeres y colectivos de la diversidad. Luego, que la pandemia profundizó desigualdades y acrecentó el temor por las violencias de género en un contexto de confinamiento social, asunto que adquirió centralidad y volvió a posicionar al 25N como fecha importante en la agenda de los feminismos. Finalizado el aislamiento social, los sectores feministas retornaron a las calles, pero en el marco de una coyuntura fuertemente polarizada por las elecciones presidenciales de 2023. En ese contexto pospandémico, de proliferación de discursos de odio hacia los feminismos, de las emergentes derechas radicalizadas y de la elección a presidente de Javier Milei, líder de LLA, se produjo un corrimiento de sentidos en mensajes de colectivas feministas y en noticias de medios tradicionales sobre el objeto de pesquisa.

La Voz y Los Andes produjeron sentidos en torno al 25N de 2023, antes, durante y luego de la fecha, vinculándola centralmente a la problemática de las violencias de género y los feminismos. Los dos medios inscriben dicha movilización en una genealogía de acciones colectivas o luchas precedentes al mencionar a “las mariposas” o emplear verbos en modo indicativo como “seguimos”, entre otras modalidades que observamos en los apartados de análisis. En ambos casos, adoptaron como fuente a organizaciones sociales feministas, en general locales, construyéndolas como voces autorizadas sobre el tema. Es destacable el empleo de estas fuentes por sobre otras de tipo individual, oficial o institucional ya que es contrario a lo que ocurre con el tratamiento mediático de casos de violencia de género o femicidio.

En relación a esto, por un lado, al adoptar estas fuentes las notas aluden a las consignas y discursos vehiculizados por estos espacios feministas en forma de hashtags, frases o en imágenes. Las citas textuales retomadas por los dos medios, refieren al contexto político actual e implícita y explícitamente a Milei y a LLA. Al presentar en mayor cantidad este tipo de posicionamientos va configurando como prodestinatario a sectores feministas, como contradestinatario a la derecha radicalizada y como paradestinatario a quienes no son militantes, pero adhieren a la lucha contra las violencias de género. En estas notas, los feminismos son configurados como colectivos, acentuando su carácter grupal y situado al recuperar organizaciones radicadas en Córdoba y Mendoza, respectivamente. Las imágenes como fotografías testimoniales también expresan la grupalidad.

Los sentidos en torno al 25N de 2023 también fueron construidos mediante los posteos de las cuentas de Instagram de las colectivas feministas de Córdoba y Mendoza. En estos discursos el 25N está vinculado centralmente a la lucha contra las violencias de género y se anudan a esta reivindicación otras demandas como la lucha contra la violencia sexual. Al respecto, la acentualidad que le dan a la violencia es plural al comprenderla no de manera individual sino, en un espiral, en conjunto con otras. Por otro lado, observamos la construcción, a través de sus publicaciones, de las derechas radicalizadas y a Milei como contradestinatario mientras que como prodestinatario se orientan a las organizaciones sociales feministas, aludidas mediante el “nosotras inclusive”. Observamos ciertos componentes prescriptivos mediante expresiones como “a las calles”, que va configurando al escenario urbano como meta-colectivo singular. Por último, consideramos que el corrimiento de sentido emerge con lo dicho. Ya no es solo el reclamo por justicia, presupuesto, leyes, entre otros asuntos, sino que se busca conservar lo logrado hasta el momento en Democracia y en el Congreso.

Tras el análisis desarrollado podemos decir que el 25N de 2023 obtuvo visibilidad a través de la circulación de una multiplicidad de discursos y en distintos espacios: en el digital mediático vehiculizados por las plataformas mediáticas, en los medios tradicionales y en el espacio urbano.

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* Dra. en Ciencias Sociales y Lic. en Comunicación Social. Investigadora del INCIHUSA- CONICET Mendoza y docente en grado y posgrado en la UNCuyo. Co Directora del proyecto de Investigación “Narrativas feministas en la pospandemia: Experiencias, discursos y representaciones de la agenda urgente”. Contacto: soledadgil01@yahoo.com.ar

** Doctoranda en Semiótica CEA-UNC-FCS y Lic. en Sociología. Becaria Doctoral por Temas Generales en CCONFINES-UNVM-CONICET. Contacto: veroaraoz90@gmail.com

 

 

Ana Soledad Gil; Verónica Aráoz. “Sentidos en disputa sobre el 25N de 2023 bajo el ascenso de la `nueva derecha´: redes sociales y medios de comunicación de Mendoza y Córdoba” en Zona Franca. Revista del Centro de estudios Interdisciplinario sobre las Mujeres, y de la Maestría poder y sociedad desde la problemática de Género, N°32, 2024 pp. 41-77. ISSN, 2545-6504 Recibido: 31 de julio 2024; Aceptado: 4 de agosto 2024

 

 

[I] Fecha conocida como el Día Internacional de las Mujeres y que desde el año 2017 es tomada por los movimientos para “parar” bajo la idea de “si nuestras vidas no vales, produzcan y reproduzcan sin nosotras/es”.

[II] La Asamblea General de Naciones Unidas define a la violencia contra la mujer como cualquier acto de violencia, ocurra en la vida privada o pública, que se base en el género y que resulte en un daño de tipo físico, sexual, psicológico o amenazas, la coerción o prohibición de la libertad.

[III] Las Mariposas eran tres hermanas: Patria, Minerva y María Teresa Mirabal.

[IV] Morresi y Vicente (2023), retomando análisis internacionales sobre fenómenos similares, optan por los términos “libertariana” y “radical” para comprender la expresión “liberal libertaria”. Por libertariana se remiten a las perspectivas derechistas del libertarismo original y por radical en relación a las ideas y acciones de estos sectores que buscan tensionar la democracia.

[V] Este adjetivo expresa la heterogeneidad de LLA ya que lo integran sectores que están a favor del aborto, aunque su líder se declare provida, y adscriben al feminismo. Sin embargo, como señala Güemes (2023), retoman ciertas referencias del feminismo de la primera ola, “selectivamente escogidas y descontextualizadas” (p.108) y cuestionan a los feminismos progresistas ya que consideran que victimizan a las mujeres. Además, reivindican los “roles femeninos tra­dicionales, se ensalza a las mujeres como madres, guardianas de la tradición, por­tadoras de lo colectivo y responsables de la reproducción social” (Güemes, 2023, p.100).

[VI] La IVE quedó legalizada en diciembre de 2020 luego de los debates de 2018 y de la negativa por parte del Congreso en ese entonces.

 

 

[VII] En julio de 2024, el diario pasó a manos mendocinas, luego de que un grupo de empresarios locales adquiriera la mayoría accionaria al grupo Clarín, que se desprende así de la sociedad editora del centenario medio de comunicación. Los nuevos dueños son: Grupo AndesmarBroda y Kristich, y además el Grupo LTN, Da Fré Obras Civiles, Familia Giuffré y Halpern. Todas son empresas mendocinas, con base de operaciones en la provincia.

 

[VIII] Las tres, son colectivas y organizaciones nacionales con anclajes locales diferenciales y se mantienen activas en las redes y en las calles.